El Alcalde, Sergio Álvarez, en su incesante anhelo por restaurar el ”Antiguo Régimen” o los antiguos modos, maneras y presuntos, a imagen y semejanza de sus predecesores y valedores del TRECESOE:
Intuimos que nuevamente a golpe de decretazo, ha nombrado Interventor Accidental de Ayuntamiento de Cacabelos a un Policía Local, sin ningún tipo de conocimiento ni cualificación mínima para el desempeño del puesto, sin ningún tipo de justificación legal.

Con el único objetivo de no dejar de cobrar la sustanciosa nómina del Alcalde,

- la de la concejala también pedánea, que todavía tiene dineros públicos sin justificar,

- la de sus mantenedores en la alcaldía del Tripartito en el Gobierno Municipal,

- y la de sus secuaces como el Auxiliar Administrativo de la Intervención, imputado en procedimientos penales del Ayuntamiento y en liquidaciones por alcance en el Tribunal de Cuentas al que se le premia desde entonces con más de 1.000 € de complementos al mes por sus favores, que pagamos todos además de su nómina,

- o la de los Policías “abnegados” en sus servicio a los cacabelenses.

Y… pagar se pagaron las nóminas de julio y agosto 2015… y se pagará la de septiembre, imaginamos que con el obligatorio informe de la “Intervención accidentada”.

Y, nuevamente, intuimos que el pago se hará con la firma del 1º clavero, y ¿este clavero oportunamente accidental, las habrá firmado a ciegas…?

Lo que está claro es que, mientras el nuevo Interventor no lo remedie, el Alcalde, Sergio Álvarez, ha encontrado al oscuro asunto de la Intervención Municipal … LA SOLUCIÓN A SU MEDIDA para iniciar en menos de 100 días de su mandato UN MAL CAMINO.
CONTINUARÁ……

Y con estos precedentes y otros pormenores: el Alcalde, Sergio Álvarez, nos cuenta, a su manera, que el Sr. Interventor le agrede en un despacho de una concejala en presencia de esta y de un trabajador municipal; y …se queda tan oreado.

Ante la DESINFORMACIÓN SOLO NOS DEJA “LA EXPECULACIÓN ?”:
¿Por trabajador municipal no se referirá al que venimos señalando en esta serie de crónicas?. ¿Un laboral con contrato en fraude de ley?, imputado en diversos Procedimientos Penales y con Procedimiento de Alcance en el Tribunal de Cuentas.

¿La concejala no será la también pedanea, de la que el Interventor Municipal también informó, en su día, sobre unos asuntos de dineros públicos que se le entregaron a ella, cuando era trabajadora en la Oficina General del Ayuntamiento, de los que todavía hoy sigue sin justificar su destino?

Cuantas preguntas, suspicacias y conclusiones “erróneas”, seguro, surgen de la falta de transparencia. Es a lo que tienden los dictadorzuelos: que nos se enteran que la glasnost es requisito básico de cualquier sistema mínimamente democrático; y un derecho fundamental de sus administrados, que son ciudadanos no monigotes a la búlgara.

Y de la EXPECULACIÓN a la CERTEZA:
Lo que si es cierto es que por decreto de Alcaldía, que es como sabe gobernar el Sr. Sergio Álvarez ante el cómplice mutismo del Tripartito, es que unos pocos días antes del “altercado con el Interventor de las cuentas”, se anulaban todos los complementos de productividad a los cuatro funcionarios que SIEMPRE han dado honradamente el cayo en el Ayuntamiento y gracias a su dedicación, esfuerzo y horas extras conseguimos salir de la situación agónica que tenía el Ayuntamiento. El importe total de 1.150 €uros al mes los cuatro funcionarios.

Por decretazo dispuso doblarle el sueldo al susodicho Auxiliar Administrativo con Contrato en Fraude de Ley mediante complementos por un importe de 1.059,24 €uros al mes, para premiar todo lo anteriormente referido y los largos meses de baja a costa de los Cacabelenses.

Porque yo lo digo, el Sr. Alcalde también premia a los cuatro agentes de la Policía Local, con un complemento por su especial dedicación al servicio “por la realización de tareas fuera de su horario de trabajo”, tras años de abandono del mismo por causas sobradamente conocidas de todos.

Y …, os preguntareis todos, ¿la Policía Local que pinta en este baile?

(Seguiremos con la crónica)

¿Que debió de opinar del decretazo del Sr. Alcalde, el Interventor Municipal?

De un día para otro, al más alto funcionario del Ayuntamiento de Cacabelos con habilitación nacional, se le impone como Auxiliar Administrativo de un área tan sensible como la Intervención Municipal, a un personaje del que conoce perfectamente que:

* Comenzó a trabajar en el Ayuntamiento con un contrato temporal de Peón de Obra.
* Por obra y gracia de sus amigos y correligionarios del TRECESOE pasó a Auxiliar Administrativo del Ayuntamiento.
* Que este ascenso lo consiguió sin acreditar ningún tipo de cualificación profesional, pues no se sometió nunca a ningún proceso de selección que contemplase la publicidad, mérito, igualdad y capacidad.
* Que además lo convirtieron en un empleado municipal laboral por un contrato en fraude de ley reconocido en varias sentencias del Juzgado de lo Social.
* Del que además conoce, por los múltiples informes que el mismo Interventor hizo a lo largo de los últimos tres años para distintos procedimientos judiciales, que está imputado en varios procedimientos penales del Ayuntamiento de Cacabelos por posible malversación de caudales públicos y apropiación indebida.
* Y que además es también responsable en una liquidación del Tribunal de Cuentas por un delito de alcance por una cuantía de decenas de miles de euros, por nefasta gestión que saqueó las arcas municipales. Fruto de lo cual se le retienen, por este Tribunal, mensualmente parte de su sueldo y tiene embargados bienes de su propiedad.
Imaginaos la situación: después de años de desesperada lucha contra la corrupción, y por arreglar el desaguisado de la caótica y ruinosa situación económica en el Ayuntamiento de Cacabelos que se encontró el Interventor, al tomar posesión de su plaza como funcionario de habilitación nacional, le colocan, porque D. Sergio Álvarez así lo ordena sin encomendarse a nadie, a uno de los presuntos responsables (según los propios informes del Interventor) de tal cambalache a “trabajar” en su departamento, bien pegadito al cogote como único personal a cargo.

En nuestra opinión estos hechos elevarían el nivel de stress a cualquier funcionario como el Interventor Municipal, con una altísima cualificación profesional, con muchos años de servicio en la Administración Pública y con archiprobada profesionalidad y dedicación, de las que en los últimos años el Equipo de Gobierno Popular puede dar fe.

(Seguiremos con la crónica).

Hoy hemos vuelto a desayunar con nuevas declaraciones a un diario, del incapaz Alcalde de Cacabelos, Sergio Álvarez, en relación al oscuro asunto de la Intervención Municipal.
Oscuro, porque a día de hoy solo conocemos tan grave incidente local por los medios de comunicación, ya que el Alcalde ha sido incapaz de dar una explicación correcta y concreta al grupo municipal mayoritario en el Ayuntamiento de Cacabelos, el PP.
Incapaz donde y como debe: un asunto tan grave es materia ineludible de Comisión Informativa o de debate en Pleno Municipal donde los legítimos representantes de la mayoría de los ciudadanos cacabelenses le podamos pedir que puntualice sobre tan turbio asunto.

… Y está claro, la premeditada falta de información conduce a la especulación y esta, en nuestro caso, a la investigación.
Remontemos para ello al momento del asalto al Gobierno Municipal del Tripartito

- ¿ sabéis cual fue el 1º Decreto de Alcaldía firmado por Sergio Álvarez, en su incesante anhelo de restaurar el ”Antiguo Régimen” o los antiguos modos, maneras y presuntos ?
Pues dejar sin efecto una firme sentencia judicial de lo social que apartaba definitivamente de la Intervención Municipal del Ayuntamiento a un empleado municipal laboral.
Así, desde el día siguiente, aquel empleado laboral imputado todavía hoy en múltiples asuntos turbios sucedidos durante el mandato del TRECESOE (de la mano de su cuñao) volvía, a golpe de Decreto de Alcaldía, al “tentador” puesto de la Intervención Municipal, para el que carece de cualquier tipo de cualificación, y del que había sido apartado por sentencia judicial.
Eso si: porque Sergio Álvarez lo manda;
sin sentencia contradictoria que los exculpase, ni informes técnicos, ni jurídicos, ni de intervención, ni de nada que recomendase su reincorporación, salvo el capricho del Alcalde.
Justo todo lo contrario de lo sucedido cuando este empleado fue apartado de la Intervención por el Gobierno Popular. Entonces los informes pertinentes para tomar este tipo de decisiones, se incluyeron en un expediente municipal y fueron corroborados con sentencias judiciales.

( Seguiremos con la crónica).

Ante su falta de iniciativas y demostrando una vez más su total incapacidad para presidir una corporación, Sergio Álvarez volvió a echar mano de su ya habitual totalitarismo antidemocrático para apurar el trámite del Pleno Municipal del jueves pasado, de forma vergonzosa.
Desde el mismo momento del inicio coartó y limitó la libertad de expresión y el derecho de intervención del Grupo Popular en la sesión plenaria, con el beneplácito del resto de sus compinches al mejor estilo del Chavismo Venezolano.
No se conformó solo con eso, sino que desde la primera intervención del Portavoz Popular le quitó la palabra cuando sus argumentos sobrepasaban su entendimiento o le molestaban (cual Maduro inmaduro para el cargo que ostenta).
Ante la total falta de iniciativas, volvió a aprobar de forma completamente irregular las Comisiones Informativas Municipales que ya había aprobado en el Pleno del 8 de julio.
Ante alusiones concretas de los grupos políticos del Tripartito al Partido Popular negó y renegó, entre berrinches y amenazas, el derecho de réplica del Portavoz Popular.
De forma completamente injustificada nombró Jueza de Paz a la cuñadísima del padrinísimo del Alcalde que es a su vez concejal del grupo socialista, al mejor estilo Peronista: porque yo lo ordeno; con un expediente municipal defectuoso, con aspirantes excluidos sin justificación alguna y con una tramitación irregular al más puro estilo soviético (porque sí).
Su desconocimiento total de la memoria histórica de Cacabelos y la improvisación de sus propuestas carentes de la dedicación que se espera de un Alcalde (que le pagamos todos), le obligó a retirar el cuarto punto del orden del día ante la ignorante chapuza monumental que planteaba. Pretendía cambiar el nombre de la calle Marquesa de Villaverde de Limia, benefactora del pueblo, convirtiéndola a golpe de decreto en hija del dictador Francisco Franco.
Solo nos quedó el oscuro altercado del Interventor Municipal incomprensiblemente silenciado, tergiversado, torticeramente manipulado…. Pero a este asunto le dedicaremos otras reflexiones.
Y… un suma y sigue que no hubo más que despropósitos propios de quien está absolutamente desorientado y el cargo de Alcalde le viene enorme, confundiendo autoridad con autoritarismo, moderación con ordeno y mando, y de quien confunde una institución democrática con la dictadura del Tripartito, en la que todo vale para extorsionar la principal función de la oposición democrática: el control de la labor del Equipo de Gobierno.
Si el cargo le viene grande vuélvase a casa; pero no persista en el obstruccionismo antidemocrático, en el populismo autoritario y deje de esconder sus grandes carencias para el cargo mediante el ocultismo que se cierne ya sobre su más que preocupante gestión.

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